Thursday, May 31, 2012

DANIELA Y OSITO: AMBOS VUELVEN A SONREIR


                                          Mi hermosa Daniela, nuestro fiel amigo Osito y yo

                        Daniela y Osito, ambos vuelven a sonreír a la vida.

Corría el año 2004, hace cerca de 8 años, mi hija Daniela a penas cumplía sus 2 añitos de edad. Yo residía en Nassau, Las Bahamas. Osito, nuestro hermoso perro Poodles, llega a nuestro hogar con dos meses de nacido, nuestra Daniela estallaba de alegría y Osito junto a ella, mi madre que en ese entonces residía conmigo en las Bahamas, nos ayudaba a criar, no solo a Daniela sino a Osito, quién se había convertido de la noche a la mañana, en una cariñosa y juguetona mascota.

Osito fue creciendo y junto a él nuestra adorada Daniela, él no era (ni es) un simple perro, es un gran perro. Daniela no fue (ni es) una simple niña, es todo un amor de hija, uno de mis motivos de amar la vida.
La madre de Daniela y yo nos separamos, pero jamás me separe de Daniela, ni de Osito.

En enero del 2008, se me traslada profesionalmente hacia Miami. Daniela, su madre y Osito quedaban detrás en Nassau. En su afán de querer conquistar lo perdido, se vienen a vivir a Miami, Osito formo parte del viaje y fue el pasajero # tres.

Cada fin de semana, cada vez que quedaba Daniela a mi lado, Osito, su fiel escudero no la abandonaba y juntos caminábamos los jardines y calles de Brickell.

El 29 de Julio del 2009, llega la peor de las noticias que puede recibir un ser humano, lejos de su tierra. Mi padre había fallecido. Osito estaba conmigo, me vio llorar, sufrió a mi lado e hizo lo posible e imposible por alegrar mi vida, tal como lo hizo Daniela.

Con el pasar del tiempo Osito continúo creciendo, y Daniela seguía creciendo a su lado.

El pasado lunes 28 de mayo, en una llamada telefónica, me comunicaba la madre de mi hija que tenía dispuesta un turno para entregar en adopción a Osito. Sus argumentos que estaba agotada, cansada y no le daba tiempo atenderlo, yo venía manejando por una carretera atestada de autos y un torrencial de lluvia que molestó en todo el trayecto de Orlando hasta Miami. Miles de argumentos persuasivos brindé para evitar que se fuera a cometer tal error. Segura de su decisión, no cedía un ápice, mi cabeza daba rumbos recorriendo casi 8 años de vida de Osito junto a mí adorada Daniela. No entendía, no lo entiendo y no entenderé jamás, como es posible que existan seres humanos tan despiadados en esta tierra y que yo me sienta responsable por haberle entregado como madre a un ser así, a mi princesa de apenas 9 años y medios de edad. Argumentos existirán miles… pero los sentimientos de un hijo y de un perrito, ambos criados prácticamente como si fuesen hermanos están por encima de cualquier argumento…

Hoy después de culminada las clases, llame por teléfono y mi hija no quería hablar conmigo, su llanto estremecía mi alma, sentía un dolor tan grande en mi corazón que las lágrimas corrían en mis mejillas, me preguntaba y me sigo preguntando: ¿Por qué causar dolor a seres queridos?, ¿Porque destruir los sueños de un niño y de un animalito tan hermoso y querido? ¿Es que acaso la crueldad y los sentimientos malvados seguirán haciendo y deshaciendo en este mundo?

Tome la mejor, la correcta y única decisión que podía tomar para evitar tan horrenda actitud. Le solicite que me entregara a Osito, cuando Daniela se enteró cambio, y cuando me vio recoger a su fiel escudero, a ese hermanito varón que jamás pudimos entregarle, con ese hermoso, noble, sincero y cariñoso perrito que alegro sus días, los míos y hasta los de su propia madre por casi 8 años, sus ojos comenzaron a brillar de felicidad.

Osito feliz me lamiaba mi rostro, se me lanzaba encima, agradeciendo por su final feliz.

No me dejo más opción que acudir a lo que nombro: Mi Verdad.



No pretendo hacer cambiar a nadie. Solo plasmo una experiencia personal, que tocó con agudeza las fibras de mi corazón y lejos de las fibras de mi corazón, lástimo los corazones de mi hermosa Daniela Amanda y de su amado y cariñoso Osito, ambos sentenciados a la eterna separación forzosa y cruel.

Las consecuencias jamás las pudo haber calculados y pudieron ser desde la muerte de Osito hasta las afectaciones de todo tipo, el correcto desarrollo y crecimiento de nuestra hermosa Daniela.

Sirva mi caso de ejemplo, un mensaje sano y educativo, a todas esas personas que andan por andar en este mundo, sin impórtales el dolor ajeno, hiriendo a cuantas almas se encuentran a su paso. Nadie se va de este mundo sin antes pagar sus pecados…y todos somos pecadores, pero existen pecados y “pecados” con comillas.

Dios ilumine los pasos futuros de la madre de Daniela, a ella que tanto proclama la palabra de Jehová, a través del evangelio y con la ayuda de los hermanos que se hacen llamar testigos de Jehová y que en su prédica, hablan del amor y el respeto profundo a la familia, al prójimo y a los animales…realmente no comprendo y repito, no existen argumentos en la faz de la tierra que me haga pensar diferente , por eso a diario les hablo de lo importante que es ser buen ser humano, no solo en la palabra , sino en las acciones.

José Martí escribió: “Si la verdad falta a su voz, la palabra, como un vano cohete, caerá apagada a tierra, en el silencio de la noche” … “No son inútiles la verdad y la ternura. No padezca” …” La grandeza está en la verdad y la verdad es la virtud” …

Con mi verdad cierro esta crónica que, de llanto y dolor agudo, que hizo estría, en mi, que no le procuro daños a nadie, y aún más conmovido por la angustia de mi ángelito de Dios y su fiel escudero. Sirvan estás letras, luz de esperanza  para que florezca la bondad, la copasión y el amor donde hay sembrado odios, rencores y crueldades.

Así valoro y reflexiono el mundo que nos ha tocado vivir.

Ladagoval

30 de mayo del 2012
Miami



Sunday, May 13, 2012

THE BEST MOTHER (LA MEJOR MADRE)

Mi hermosa Madre

THE BEST MOTHER (LA MEJOR MADRE)

Cerca de dos meses sin publicar un artículo.

Hoy son tan necesarias las letras, como ese hermoso 6 de octubre del 67, fecha en que me trajiste a este mundo, con todo el amor, la bondad y los deseos que te caracterizan.

Ayer en la noche, acostado en mi cama de Ébano; la misma que me sostiene en brazos de Morfeo; volé hasta el cielo que te protege, allá en tierras lejanas de Chile. Solo deseaba verte dormir, acariciando tu dulce almohada, tal como acaricias a tus 5 cachorros. Te veía y me preguntaba qué tan lejos se puede estar de la persona que hizo el milagro a través de Dios y entrego  vida a otros seres.  En ese viaje recordaba muchas anécdotas, conversaciones, momentos únicos que no tienen precio monetario, pero si un inmenso valor espiritual. Pensaba como he podido sobrevivir casi 7 años desde la última vez que nos vimos? No tenía respuesta. La distancia y el inmenso amor que siento por ti han logrado ser amigos, se han puesto de acuerdo para lograr una concentración y control de mis emociones.

Hoy cuando me levantaba, prácticamente en la tarde, aun no sabía si llamarte, escribirte, hacer un video-conferencia, realmente no sabía. Aun no lo sé, si esta carta será ó no lo que dentro de mí sucede. No valen todas esas acciones si no te tengo a mi lado. El tiempo corre y corre de prisa y hemos dejado de disfrutar juntos, de montarte en una moto como solía hacer y llevarte de viaje por caminos desconocidos, donde el aire fresco, el sol, la lluvia y la naturaleza que nos rodeaban eran los únicos testigos de lo feliz que nos sentíamos juntos.  Aun no sé cuando nos podremos ver, solo pienso en cómo será y en donde será. La ausencia de mi padre, me ha convertido en un ser aun más sensible y sentimental de lo que era. Sé que tu presencia me dará más estabilidad, más seguridad y llenare de mucho más amor mi corazón y felicidad mi existencia.

Ya sabes que no soy perfecto como lo creías, pero no he dejado de ser ese niño mimado, juguetón, cariñoso, espontaneo, humilde y amoroso que siempre conociste. Te confieso, que aun así, soy feliz a mi manera. Estoy viviendo mi propia vida y no la que otros desearan que viviera por los falsos conceptos de moralidad.

Lograr escribir estas líneas que pudieron ser no escritas, han sacado dentro de mí, lagrimas que no empañaran un hermoso día como el de hoy “Día de las Madres”, servirán para limpiar el camino que nos llevara a reencontrarnos.

Buscando en el cajón de recuerdos encontré este poema que te dedique hace 21 años, espero que llene tú corazón de mucha felicidad tal como lo logro hacer, cuando aun mi cabellera no peinaba de blanco.
MADRE

Tengo voluntad y dignidad,
para evocarla en mis sueños.
Muchos son los días que pasan
Y no la veo como antes.

Si amor post-morte he de dar
Pues ese será para usted,
que ha sido alma inspiradora
en mis sueños y deseos realizables.

Amo su sacrificio, como los días
Que precedieron mi nacimiento.
Gracias por darme la vida que poseo
Y no otra por orgullo propio

Ladagoval
Mayo 04, 1991

Con este poema, con estas líneas, con toda mi energía positiva y con todo el amor que existe en mi corazón te deseo lo mejor de este mundo y solo le pido a Dios y todos los santos que ilumine tus pasos y que te entregue mejor salud cada día, que la paz, la tranquilidad y la prosperidad llenen tu existencia de mucho amor y felicidad.

Nota:

Ah!!! Sabes que los cinco somos bien amoroso contigo, cada uno con sus característica, tal vez esta es la carta que todos hubiésemos querido escribirte, todos juntos aportando una palabra cada uno en su estilo y sobre todo con mucho amor. Te contare algo que jamás te he dicho. Nuestro padre en cierta ocasión sentado en su mesa de la sala, preparando los cucuruchos de maní que luego él vendía para poder darnos de comer a todos, hablando de ti, me dijo: Si algo estoy tranquilo y orgulloso, es que su madre es una santa y les dí la mejor madre de este mundo a ustedes… por lógica ese día estuve llorando a su lado. Si nuestro padre hubiese estado en nuestro mundo, hubiese sido el primero en felicitarte y regalarte un cucurucho del mejor maní que tostaba…

Solo me queda decirte que: Todos te adoramos Mamá

Tú hijo

Ladagoval

13 de Mayo del 2012